La mayoría de las personas saben que la alimentación es fundamental para tener una buena salud a todas las edades. Sin embargo, no siempre tenemos suficientemente claro en qué consiste comer bien.
Una de las claves para una buena nutrición empieza por saber qué es lo que se come; es decir, conocer la información nutricional de los alimentos.
Pero esto no es suficiente. Una buena nutrición significa que el cuerpo obtiene todos los nutrientes que necesita para funcionar adecuadamente. Por lo tanto, también es necesario entender qué nutrientes son necesarios para mantener una dieta balanceada. Esto depende, entre otras cosas, de la edad y de ciertas condiciones de salud.
Información nutricional: la importancia de saber lo que comes
La principal razón por la que es importante conocer la información nutricional de lo que comes es que estos datos te ayudarán a hacer mejores elecciones y a diseñar una dieta balanceada. Este tipo de información incluye, principalmente, las cantidades porcentuales y/o por ración de los principales nutrientes, como proteínas, hidratos de carbono, grasas, vitaminas y minerales.
Además, conocer la composición de los alimentos te ayudará a elegir los que son más saludables para ti y para tu familia. También te ayudará a desechar las comidas que sean menos nutritivas o que contengan más cantidad de calorías, de grasas saturadas o de sodio de lo que sea conveniente.
Cómo saber qué nutrientes contienen los alimentos
La principal herramienta para conocer los nutrientes que contienen los alimentos son las etiquetas con la información nutricional. Sin embargo, este tipo de información solo está disponible en los alimentos envasados, y en los términos que dicte la normativa de cada país.
En el caso de los alimentos no envasados, existen otras maneras de conocer qué nutrientes contienen. Una manera de hacerlo es cocinar siguiendo recetas que incluyan la información nutricional del plato. Otra forma es acceder a la información nutricional de cada alimento, en particular a través de páginas web especializadas.
Consejos para mantener una dieta nutritiva y equilibrada
Una dieta nutritiva y equilibrada debe aportar cantidades suficientes de todos los tipos de nutrientes; es decir, de proteínas, carbohidratos, vitaminas y minerales, así como grasas. Todos los nutrientes son necesarios y cumplen su función. Tanto su exceso como su defecto puede provocar problemas en el funcionamiento del organismo y dar origen a enfermedades.
Infórmate sobre lo que tu cuerpo necesita
En función de tu edad, tu género, tu estado de salud y tus requerimientos físicos necesitarás más o menos nutrientes. Saber esto te ayudará a planificar tu alimentación y buscar los alimentos que más te convienen.
Puedes encontrar esta información en páginas web especializadas o consultar con un médico o nutricionista.
Basa tu dieta en carbohidratos ricos en fibra con almidón
Los carbohidratos con almidón, como patatas, pan, pasta y arroz, deben constituir algo más de un tercio de los alimentos que consumes.
Además, es importante que optes variedades ricas en fibra, como cereales o granos integrales o patatas con piel. Esto hará que tu sistema digestivo funcione mejor y que te sientas más saciado.
También tienes que tomar alimentos ricos en proteínas y moderar el consumo de grasas saturadas. Las grasas, tanto las saturadas como las insaturadas, son necesarias para el buen funcionamiento del organismo, pero deben ser consumidas en su justa medida.
Come muchas frutas y verduras
Es recomendable consumir al menos 5 porciones de frutas y verduras al día. Se pueden incorporar en todas las comidas, crudas o cocinadas, como acompañamiento, guarnición o plato principal. La fruta también es un gran aliado como tentempié a media mañana o a media tarde.
Las frutas y las verduras son ricas en fibra, vitaminas y antioxidantes, son saciantes y, gracias a sus azúcares naturales, nos dan energía al instante.
Reduce el consumo de grasas saturadas
Nuestro organismo necesita grasas, pero importante prestar atención tanto a su cantidad como a su calidad. Es especialmente importante evitar las grasas saturadas de los alimentos procesados y desterrar por completo de la alimentación las grasas trans.
Consume alimentos ricos en grasas insaturadas
El aceite de oliva o el pescado azul son alimentos especialmente ricos en grasas insaturadas, un tipo de grasa beneficiosa para el organismo y para la salud. Este tipo de grasas también se encuentran en los frutos secos y en las semillas.
Reduce el consumo de azúcar
Los azúcares naturales son buenos para el organismo. El verdadero problema del azúcar viene de la mano de los alimentos procesados, incluidas las bebidas azucaradas, los jugos, los batidos y los refrescos.
El etiquetado de los alimentos es un buen aliado. Para tener una orientación, se considera que un producto tiene un alto contenido en azúcar cuando supera los 22,5 gramos por cada 100. Un producto realmente bajo en azúcar tiene como mucho 5 gramos de azúcares por cada 100.
Modera el consumo de sodio (sal)
Los adultos no deberían consumir más de 6 gramos de sal al día, en condiciones de salud normales. Las personas con la presión arterial alta tienen que tomar aún menos, en función de lo que su médico les haya indicado.
Hay que tener en cuenta que muchos alimentos tienen sodio sin necesidad de añadirles sal, por lo que es muy importante tenerlo en cuenta a la hora de añadir más sal a las comidas.