Después de muchos años viviendo en la misma casa es normal que nos casemos de verlo todo como siempre y nos decidamos por darle «un lavado de cara» o por hacer una reforma integral, dependiendo de la antigüedad de la vivienda y su estado. Además, tras el pasado confinamiento por el Covid y la actual situación que estamos viviendo, en la que nos toca pasar mucho más tiempo en casa, son muchos los propietarios que han apreciado las carencias de sus hogares y se han propuestos solucionarlas.
Es por todo esto, que los trabajos y contrataciones de empresas de reformas, así como la demanda de servicios de decoración e interiorismo se han disparado enormemente, en comparación con otros años. Si tú también te estás planteado hacer algunas reformas en tu casa, pero no tienes el presupuesto para contratar un decorador, a continuación te doy los mejores consejos para que puedas organizar la reforma de tu casa con éxito, y sin morir en el intento.
Consejos para organizar la reforma de una casa
Si no quieres tener que mudarte de casa mientras hacen los trabajos de reforma integral, siempre tienes la opción de hacerla por fases. A continuación de digo cómo hacer una reforma por fases después de haber hablado con los profesionales de reformaster.
Comenzar la reforma por las estancias independientes de la casa. Estas son siempre la cocina y el baño, sobretodo a nivel de pavimentos y revestimientos. Lo más habitual a la hora de reformar estas estancias es que se necesiten derribos, los hay que deciden abrir la cocina al salón, hacer zanjas para las instalaciones de fontanería y electricidad, cambiar bañeras por platos de ducha, sanitarios, baldosas… Lo último serán los techos de la casa y el mobiliario, por supuesto.
Si quieres abrir la cocina al salón debes tener en cuenta que esta obra también afectará al salón. Por lo que debes plantearte unificar el pavimento de esta con el del resto de la casa. Por otra parte, al tirar un tabique, probablemente tendrás que reubicar ciertos aspectos de tu instalación eléctrica, como enchufes, interruptores de luz… Si tu intención es crear un mismo ambiente con la cocina y el salón, quizá sea más conveniente comenzar por esta zona y dejar para después el resto.
Tras la cocina y los baños, llega el turno de los suelos. Lo mejor es cambiarlo todo de una vez para unificar todo el pavimento de la casa. De esta forma, evitarás comprarlo e instalarlo por fases y correr riesgos como que descataloguen el modelo que has elegido, que se noten cambios de color por desgaste y uso, o que se aprecien diferencias por cambios de partidas del pavimento.
¿Has pensado en colocar aire acondicionado? Para esto tienes dos opciones: por conductos para toda la casa o con split. Sea cual sea tu elección te aconsejamos hacer este cambio de los primeros, ya que necesitarás colocar conductos por los techos y pasar tuberías que desagüen en la cocina o el cuarto de baño. En el caso del aire acondicionado por conductos, en muchos casos es necesario abrir todos los techos para meterlos, por lo que puede parecer una reforma engorrosa, que no querrás acometer cuando esté todo limpio y terminado.
Si necesitas cambiar las puertas de toda la casa, esta será la siguiente tarea. Tanto si las cambias por completo como si las reaprovechas pintándolas o poniéndolas a punto. Ten en cuenta, que si optas por la segunda opción, tendrás que cortarlas unos centímetros para salvar la diferencia con el cambio de suelo, sobretodo si lo has instalado directamente sobre el suelo antiguo.
Otro de los cambios más frecuentes cuando hacemos reformas en casa es el cambio de las ventanas. Este será el siguiente punto. Además, si tenemos que poner balconeras, será mejor hacerlo después del cambio de pavimento, por el mismo motivo que el anterior con las puertas, y evitar que nos dificulte su apertura.
Lo último será la pintura de las paredes. Muchas familias aprovechan para deshacerse del anticuado gotelé y alisar las paredes. Si tu también lo has decidido, hazlo antes de meter los muebles para evitar tener que limpiar todo el polvo que suele dejar este tipo de reformas de paredes. Además, debes tener en cuenta que los acabados como la pintura y el papel pintado siempre deben dejarse para lo último.
Además de la ventaja económica de poder pagar por cada fase que se va finalizando, las reformas por fases cuentan con más ventajas como el tiempo para perfilar y mejorar el proyecto. Aunque debes tener en cuenta que de esta forma el tiempo de duración será más largo y necesitarás paciencia hasta poder ver el proyecto completamente acabado.